NUNCA ESTARÁS “TOTALMENTE PREPARADO”
Decir o asumir que uno está preparado, listo para emprender una acción, enfrentar una tarea o desarrollar completamente algo -cualquier cosa-, es una falacia que creo nos contamos a nosotros mismos o declaramos…
En realidad, creo, nadie puede afirmarlo porque siempre hay algo o mucho que se puede aprender y existirá esa frase: “Yo no lo sabía…”, que llega como pensamiento ante una dificultad que no se imaginó y por lo tanto no se previno…
Esto no quiere decir que se practique el inmovilismo que se expresa en un “mejor no me meto” y hace que se desista, sin ni siquiera tratar. Es que nunca estarás preparado para todas las contingencias que pudieran surgir, pero si crees firmemente en ti mismo, en tu bagaje de conocimientos y experiencia sobre el asunto que tratas de abordar…: ¡Adelante! ¡Ataca! ¡Avanza!
Lo mejor que puedes hacer es ir resolviendo las dificultades en el camino, pero no quedarte parado, porque lo más probable es que lo difícil se convierta para ti en un muro infranqueable y desistas.
Esto que te puede sonar a palabras que lo único que buscan es animarte, en realidad es la actitud que necesitas para emprender lo que sea. Recuérdalo, nunca estarás totalmente preparado para nada y lo valioso es eso: Te atreves. Cuando subes la -a primera vista- montaña
imposible de escalar y vas venciéndolo todo hasta llegar a la cima, mira abajo y disfruta del maravilloso paisaje que tienes a tus pies.
¡Atrévete! ¡Avanza! ¡No te quedes!
Manolo Echegaray.
